El disco lo componen 9 canciones, de las cuales 3 son en euskera y 6 en inglés
Cuenta con la colaboración de Mikel Etxaburu, Lide Hernando y Joseba Aparicio.
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Bizi Bagina Bezala (como si estuviésemos vivos). Por mucho que nos de repelús mencionar la palabra pandemia en estos momentos, para Nhil fue el punto de partida de una nueva era de aprendizaje y creación.
Cuando acceder a los locales de ensayo era imposible, encontraron refugio en el garaje de Sara y ahí empezaron a sonar las primeras melodías que envuelven este segundo disco. Por eso Bizi Bagina Bezala hace referencia a que sentían que, aunque el mundo estaba parado la banda seguía viva.
Nhil escribe desde las emociones y de eso trata el disco, de un subir y bajar en una montaña rusa, de conflictos internos, de buscar el equilibrio de la vida, pero sobre todo de las emociones.
En total son 9 las canciones que construyen el viaje, de las cuales 3 son en euskera y 6 en inglés. Con diversas colaboraciones, Mikel Etxaburu, Lide Hernando y Joseba Aparicio ponen la guinda al pastel en este recorrido de mezclas entre el pop, soul y funk.
Ahaztu Baino Lehen está construida gracias al libro de Ahaztu Baino Lehen, Ama de Mikel Etxaburu que relata diversas situaciones que el alzheimer le ha hecho vivir con su madre. La letra del tema está construida en base a ese libro.
Lide Hernando de la banda Liher, aporta el toque rockero que Bilatzen Oreka pedía. Y finalmente Joseba Aparicio regala su arte para tocar la trompeta en toda la sección de vientos del disco.
Parte de este nuevo álbum, ha sido auto grabado en el estudio NekroSound por Asel Errasti y Ander Sevilla. En cambio, la otra mitad del álbum; la voz principal, los coros y el gospel Soul Drivers, han sido grabados en PullPush Studio. En conjunto el trabajo entero ha sido mezclado y masterizado por Santi Quizhpe.
Su primer video has ido el adelanto de su primer single DANCE.
Nhil nace en Aretxabaleta (Guipúzcoa) durante el año 2017. Parte de un grupo de amigos con inquietud de crear canciones sin un estilo definido, simplemente como experimento. Así se juntaron al comienzo del proyecto Asel Errasti en la batería, Xabi Zuazabeitia al bajo, Beñat Arrieta en la guitarra y Sara Alonso con la voz y piano. Y finalmente se unieron los vientos a la banda, Aitor Ruiz De Austri al trombón y Lia Garai al saxo.
