Fuente: periodicoeldia.com.mx –
Honor a quien honor merece, es por ello que Ramón Ayala, precursor del sonido norteño y ganador de cuatro Grammys, recibe un justo homenaje con el lanzamiento de una compilación que contiene todos sus éxitos.
“Lo esencial de Ramón Ayala y sus Bravos del Norte”, es el título de esta antología de 67 canciones, entre las que se encuentran: “Me caí de la nube”, “Me sacaron del Tenampa”, “Un puño de tierra”, “Tragos amargos”, “Los dos alazanes”, “Bonita finca de adobe”, “Chaparra de mi amor”, “Gaviota”, “Te traigo estas flores”, “La rama del mezquite”, “Sólo una patada” y “Quémame los ojos”, entre otras.
Jorge Ibarra Márquez, gerente de Fondo del Catálogo de Sony Music México informó que esta colección también incluye 22 videoclips de las presentaciones en vivo de Ramón Ayala en programas televisivos y de eventos como la entrega de los premios Furia Musical, así como en sus inolvidables presentaciones en el programa de “Siempre en Domingo”, que atinadamente condujo el desaparecido señor Raúl Velasco.
Algunos de los videos son: “Calles de Piedra”, “Dormí vestido”, “Casas de madera”, “Ojitos soñadores”, “Triste recuerdo”, “Lágrimas”, “Central camionera”, “El diamante”, “Sólo una patada”, “Seis años” y “Nomás a mi manera”, entre otros.
Jorge Ibarra precisó que: “Ramón Ayala es el más grande acordeonista norteño de las cuatro últimas décadas, que surgió de aquel inolvidable grupo Los Relámpagos del Norte, donde hizo una magnífica dupla con Cornelio Reyna”.
Recordó que Ramón fue iniciador del sonido norteño y que empezó a tocar el acordeón a la edad de cinco años y contó la anécdota que cuando sufría un desperfecto, le tenía que pegar las teclas con chicle.
También indicó que a los 14 años, Ayala conoció a Cornelio Reyna, cuando se separó de su músico Juan Peña, quien es reemplazado por Ramón y se dan a conocer como “Los relámpagos del Norte”. Así se presentaban en las cantinas, pero es en el año de 1963 que empiezan a subir como la espuma con el tema “Ya no llores”, continuando con éxitos como: “La tinta de mi sangre”, “Mi tesoro”, “Ay ojitos”, “Ni por mil puñados de oro” y “Chaparra de mi amor”.
