
Madonna dejó con la boca abierta a los presentes en el Súper Bowl y a los millones de personas que lo vieron por televisión con su actuación. Demostró una vez más por qué aquí y en China sigue y seguirá siendo La Reina del Pop. Los comentarios en las redes sociales no se hicieron esperar: “que si la coreografía fue maravillosa”, “que si su condición física está mejor que nunca”, “que su cutis es envidiable”, “que el vestuario fue maravilloso”, “que su voz fue espectacular”. Y no faltó quien dijera que sentía envidia y que quería urgentemente los datos del cirujano plástico de Madonna. ¿Y quién no? Pero ¿también estaríamos dispuestas a pasar las horas que Madonna pasa en el gimnasio? Ahí si quién sabe, lo que sí es cierto e innegable es que Madonna tiene un trono y una corona que difícilmente alguien logrará quitarle. De hecho Madonna sólo hay UNA. Y nadie ocupa jamás el lugar de nadie.