
Aquí Alberto, Marjorie y yo ya instaladas en el camerino de Julión Alvarez donde pudimos felicitarlo y platicar antes de irnos al after party en un lugar de Polanco que Julión cerró sólo para atender a sus invitados. Un honor estar ahí y compartir con sus seres más queridos su tercera noche de gran éxito en el Auditorio Nacional. ¡Qué chulada!