
Por: Blanca Martínez
Ante un Auditorio Nacional lleno en su totalidad apareció en el majestuoso escenario el artista mexicano que ha llevado el nombre de México a nivel internacional: Alejandro Fernández, recibiendo desde el inicio el pasado jueves 29 de Octubre un caluroso aplauso lleno de gritos y piropos del público que esperaba con ansias este concierto.
Sus primeras palabras fueron para agradecer a la vida: “sentí a la calaca muy cerca y le agradezco a Dios que me permitió seguir con vida para poder estar hoy con ustedes”.
Tanto sus músicos como su mariachi estaban pintados de la cara haciendo alusión a la muerte, tradición muy arraigada en nuestro México.
Vistiendo, como siempre, espectacular, inició el concierto con canciones de su disco Confidencias Reales y provocando el delirio de sus fanáticas que le gritaban piropos de todo tipo a los que él respondía enviando besos y con su espectacular sonrisa.
Su voz lo llenó todo, cantó con muchísimo sentimiento y entre el público estaban sus hijos, a quienes con mucha frecuencia dedicaba miradas, besos y canciones.
El delirio y los gritos no se hicieron esperar en el momento en el que El Potrillo de México aparece vestido con el traje charro que porta con singular galanura.
Esa espectacular entrada que hace es simplemente ¡memorable!
Las fans que participaron en la dinámica que Alejandro hizo en sus redes sociales #AFinandoConElPotrillo estaban felices en primera fila y pudieron entrar al camerino, experiencia que jamás olvidarán.
Entre el público se encontraba Luz Casal, cantante, compositora y productora española a quien Alejandro agradeció su presencia.
Fue un concierto mágico, lleno de energía, Alejandro se mostró especialmente sensible y hubo momentos en que dejó que las lágrimas rodaran por sus mejillas y esto provocó el delirio del público que le aplaudía aún más.
Cantó muchísimos temas que pedía al público cantaran con él y pretendía terminar el concierto cuando cantó “Como quien pierde una estrella”, pero por su desde claro que el público no se lo permitió gritando el clásico: ¡otra, otra, otra! Y regresó para cantar una serie de canciones como homenaje a su padre, Don Vicente Fernández.
Finalmente, El Potrillo agradeció al público su cariño y lo despidieron con gritos, aplausos y es innegable que concierto tras concierto Alejandro Fernández se supera a sí mismo, logra sorprender a su público y a la crítica especializada y presenta un espectáculo con una impresionante producción, excelentes músicos y coristas y un equipo que trabaja a la altura del artista con el que están. UN GRANDE: El Potrillo del mundo.
ERES GRANDE, POTRILLO
Por: Blanca Martínez
Tu carrera yo he seguido
hace muchos años ya
la sencillez no has perdido
cada día creces más.
Como persona y artista
eres grande de verdad
talentoso y detallista
agradecido y tenaz.
Por eso en tantos países
tú ya has logrado triunfar
y has sembrado tus raíces
y triunfarás aún más.
Que Dios por siempre bendiga
a tu carrera y tu vida
que el éxito siempre siga
aumentando sin medida.
Potrillo, te lo mereces
y yo te adoro, Potrillo
y sé que mientras más creces
jamás pierdes lo sencillo.
Gracias por nuestra amistad
que por siempre durará
y por lo profesional
mi gratitud siempre está.
https://www.youtube.com/watch?v=AEGRMX2ei-w
https://www.youtube.com/watch?v=71VGo0jiFeg