
Fuente: vanguardia.com.mx –
“El Ausente” fue la primera melodía de la noche, la cual despertó el entusiasmo de los seguidores que no dudaron en corearla a todo pulmón. La música no paró, el cantante enlazó sus temas al seguir con “Chaparrita Pelo Largo”, a la que le siguió el corrido “De esta Sierra a otra Sierra”.
Elegante con un pantalón de negro, camisa de rayas y una chamarra de cuero, combinada con botas y sombrero negro, dejó que sus admiradores se dieran un taco de ojo resaltando que aún conserva su galanura.
Los coros del público inspiraron más al cantante, hasta alcanzar uno de los mejores momentos del concierto con “Laurita Garza”, “Abrazado de un Poste” y “China de los Ojos Negros”.
Mientras más avanzaba el concierto, las peticiones no paraban de los casi 500 asistentes que pedían a gritos canción tras canción y él, con amabilidad, accedía a lo que le pedían.
Después de la interpretación de “Los Dos Amigos”, dio una muestra de la variedad contenida en su nuevo disco, “Baila Morena”, canción que comenzó a ritmo de reggaetón o “regazón” como lo llama él, la cual resume el característico buen humor y encanto del cantante. Su nuevo material discográfico, adelantó, llevará el nombre de “Cuando los Hijos se Van”.
Por más de cinco ocasiones intentó despedirse del público, pero no lo dejaron, le solicitaban “otra y otra” y él como buen consentidor siguió cantando. Fue sorprendente como de corridito cantó, bailó, promocionó sus discos y hasta hizo “tubo” sin hacer una pausa en su concierto.
El ídolo norteño bromeó e interactuó con la gente y les dijo “Hay que cantar, bailar y estar felices”, además mandó saludos al Gobernador y no paró de lanzar besos a sus admiradoras que le dijeron cuanto piropo pudieron como el clásico “chiquitito”.
Por casi una hora y media, Lorenzo de Monteclaro entonó melodías que marcaron su auge en el mundo de la música y con gusto, tras terminar su presentación, convivió con sus fans que abarrotaron la parte lateral del escenario, él, dispuesto como siempre, se tomó la foto del recuerdo, firmó autógrafos y dejó un buen sabor de boca.