LOS TUCANES DE TIJUANA INTERPRETAN ”EL CORRIDO DEL DIABLO” TEMA DE LA PELICULA ”EL INFIERNO”

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Los Tucanes de Tijuana interpretan “El corrido del Diablo” tema de la película “El Infierno” que refleja la situación mexicana de violencia e inseguridad.

En septiembre volverá a sonar el nombre de Los tucanes de tijuana en los medios de comunicacion, al formar parte vital del filme “El infierno”.
Para la película, que refleja la situación mexicana en este 2010 con la idea de que no hay nada que celebrar dada la relación entre el narco y la política, entre muchas otras cosas, el grupo interpreta: “El corrido del Diablo”.
Además del tema inédito se escuchará “Mis tres viejas”. El llamado narcocorrido sirve para situar la historia dirigida por Luis Estrada (La ley de Herodes) y protagonizada por Damián Alcázar.

Notas del Director

EL INFIERNO, épica sátira de ácido humor negro, nos lleva de la mano de Benjamín García (Damián Alcázar), conocido en los bajos fondos como “El Benny”, a hacer un recorrido por el estado actual de las cosas en el México de hoy, y bajo su peculiar punto de vista, a adentrarnos en el oscuro mundo del narcotráfico y el crimen organizado.
¿Porqué qué tema tiene hoy más actualidad y repercusiones que la guerra contra el narco y la violencia demencial que se ha desatado a lo largo y ancho del país?
Para bien o para mal, el narco, hoy, está en boca de todos.
La multiplicación de noticias en todos los medios, programas de televisión, libros, ensayos y crónicas, sobre el tema del narcotráfico y su violencia inherente, dan cuenta, por todo el mundo, y desde múltiples enfoques y puntos de vista, de un fenómeno frente al que nadie puede ser indiferente y que nos afecta, y preocupa, a todos.
Pero desafortunadamente, ahora que presumimos que tenemos absoluta libertad de expresión, el cine mexicano, otra vez, pareciera ser ajeno a ello, y por eso es que creemos que ha llegado el momento de presentar una película que toque el tema con la calidad y la seriedad, más no solemnidad, que el asunto requiere.
EL INFIERNO pretende circunscribirse en la zaga y tradición de películas de mafiosos, que a lo largo de la historia del cine, han fascinado a los públicos del mundo. Desde “The Godfather” de Coppola, la obra maestra del género, a la genial “Sacarface” de Hawks, pasando por el virtuosismo de Scorsese en la insuperable “Goodfellas”, sin olvidar los brillantes acercamientos al género de los hermanos Coen,  “Miller’s Crossing” y “No Country For Old Men”.
Sin lugar a dudas el cine de malos y malosos ha ejercido un potente atractivo para la taquilla y, esperamos, este sea el caso con nuestra película. Porque EL INFIERNO es eso y no otra cosa: una película de mafiosos… A la mexicana.
EL INFIERNO es una película muy ambiciosa, no sólo por su costo y valores de producción, sino, sobre todo, en términos visuales y narrativos. Para ello ha reunido un reparto sin precedente en el cine mexicano actual y que conforman un enorme mosaico de personajes inolvidables entre los que es difícil distinguir a los malos y a los peores; y a un equipo, atrás de cámara, con varios de los más destacados y galardonados artistas y creadores del cine nacional.
EL INFIERNO es también una sátira con un alto contenido político, en los que se asume, a cabalidad y sin temor, los arquetipos y estereotipos del imaginario colectivo sobre la Narcocultura, los capos, los sicarios y sus intocadas contrapartes: los políticos, sus Instituciones y sus selectos socios en las elites del poder. Un retrato del México del 2010… Un retrato de EL INFIERNO.
Porque todo está presente en la película, desde los narcocorridos hasta las trocas, de los sombreros y las botas, a las armas dignas del mejor de los ejércitos y, por supuesto, la violencia, sus nuevos Santos y el dinero… Mucho dinero. Pero sobretodo están presentes también, la corrupción y la impunidad, que son la materia prima de lo que se alimenta el fenómeno.
¿Pero porqué una película que transcurre en la época actual y que abarca algunos de los problemas más acuciosos de nuestra realidad como lo son: la guerra, la violencia, la desigualdad social, el narcotráfico, la corrupción, la crisis económica, la migración, el desempleo y sus efectos en la sociedad, en el marco de una conmemoración sobre hechos tan concretos como el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución?
La respuesta es, qué tal vez, éste sea el mejor momento para hacer un corte de caja y reflexionar donde estamos parados como país y hacia a donde nos encaminamos como sociedad, si seguimos por donde vamos, en un futuro no muy lejano.
Se trata de que ésta oportunidad, en la que conmemoramos dos eventos definitorios de nuestra historia, nos dé pie, también, a vernos y pensarnos como país, en un contexto en el que se oigan otras voces, otros puntos de vista, quizá discordantes, y que la pluralidad, valor esencial de cine, esté también presente en la discusión y reflexión sobre estos importantes hechos.
Por que hoy, igual que hace cien, igual que hace doscientos años, pareciera que nos encaminamos hacía otro momento de definiciones y transformaciones que, como en su época, lo fueron la guerra de Independencia y la Revolución. Porque pareciera que el tiempo y la historia buscaran exaltar las luces y ocultar las sombras, pero esos hechos históricos se dieron también, en un marco muy similar al que vivimos en estos días.
Pero estas reflexiones, más allá de que se esté, o no de acuerdo con ellas, lo único que pretenden es plantear una interrogante sobre cuál será el futuro del país.
EL INFIERNO, de una manera controversial y corrosiva, pero no carente de humor, nos puede ayudar a reflexionar sobre ello.
Muy pronto sabremos la respuesta.