Por: Blanca Martínez
José Manuel Figueroa, el primogénito de Joan Sebastian, lleva la música en la sangre, el talento no lo hurta, lo hereda, pero además, hay gente que es hijo o hija de grandes artistas, de grandes talentos y no sólo no los heredan, sino que carecen completamente de ellos. Este no es el caso, José Manuel Figueroa nació con estrella, es una combinación de su madre: Teresa Figueroa y de su padre, José Manuel Figueroa a quien el mundo entero conoció como Joan Sebastian.
Tuve el privilegio de conocerlo cuando él tenía 19 años de edad y trabajar en la promoción de su primer disco profesional: “Expulsado del Paraíso”. Conocí no sólo al compositor y cantante sino al ser humano: apasionado de la música, de los caballos, sensible, romántico, capaz de suspirar al ver un bello amanecer en Juliantla o al escuchar el sonido de su mejor amante: su guitarra.
José Manuel compartió el 27 de enero esta foto en sus redes sociales y escribió lo siguiente:
#UltimaMaroma Yo de Caballerango, apoyando al único Rey del Jaripeo @JoanSebastian mi padre, mi maestro de vida en poesía, a muchos se les olvida donde empece, de ahí abajo aprendí todo de mi padre, te amo Viejo, hoy y siempre #FabricaDeCaballos #RanchoDeLaGuitarra
Y me consta que José Manuel Figueroa empezó desde abajo, que ha librado batallas difíciles en su carrera y en su vida personal, pero también me consta su lucha, su entrega, su tenacidad, y él, con las piedras que otros tratan de ponerle en el camino no se derrumba, hace castillos.
Sus fanáticas enloquecen en su espectáculo ecuestre y le lanzan todo tipo de piropos, su público sí conoce su talento indiscutible y le es fiel, lo sigue a donde se presente y lo ama y cabe mencionar que tiene público de todas las edades, que no sólo lo admiran las mujeres, sino los hombres. A lo largo del tiempo que tengo de conocerlo sigue sorprendiéndome, y es que no me he enfocado en sus parejas sentimentales, sino en su carrera, en su talento, en sus canciones, en ese joven que conocí y al que su padre siempre le tuvo toda la fe del mundo.
Me soprendió con su actuación (no siendo actor) en la serie de su padre producida por Carla Estrada, me soprendió con su excelente interpretación del tema “Lobo Domesticado” primer sencillo del Tributo a Valentín Elizalde que lanzó su disquera, Universal, y que está en primer lugar de ventas en este momento. Y sé que me sorprenderá con su nuevo disco, porque le sobra talento, porque es un compositor versátil, pero además, también sé que me sorprenderá con su espectáculo ecuestre, con su vestuario.
Pero lo más importante, este 2017 José Manuel Figueroa estoy segura que entregará el corazón y el alma a su público en cada una de sus presentaciones, en cada una de sus canciones, en cada acorde de su guitarra, en cada suspiro que lanza al viento cuando llegan las musas y nace una canción.
Y será bendecido desde el cielo por Trigo, Sebastián y Joan Sebastian…
Aquel muchacho de 19 años que conocí hoy es un hombre que ha crecido como músico, como arreglista, como productor, como compositor y como cantante. Es el hijo de Joan, que por ser el primogénito, más tiempo estuvo con él, más lecciones recibió de su padre, más consejos, quizá también más regaños, pero desde luego más vivencias y experiencias que nada ni nadie puede robarle.
Mis aplausos, mi reconocimiento a su evolución en todos los sentidos y si aún no lo sigues en sus redes sociales te invito a que lo hagas:
Twitter: @JoseManFigueroa
Facebook: josemanuelfigueroaofficial
Instagram: josemanfigueroa
Te comparto el video de “Tierno Pecado”
