27 DE ENERO, DÍA INTERNACIONAL DE CONMEMORACIÓN EN MEMORIA DE LAS VÍCTIMAS DEL HOLOCAUSTO

Soldados Soviéticos liberando prisioneros de Auschwitz-Birkenau

Fue el 1 de noviembre del 2005 cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó oficialmente el 27 de enero como el Día Internacional de Conmemoración en Memoria de Las Víctimas del Holocausto, eligiendo esta fecha en especial porque fue el 27 de enero de 1945, cuando el ejército de la entonces Unión Soviética, liberó a los 7 mil presos que aún permanecían en el ya abandonado y tristemente célebre campo de concentración y exterminio de Auschwitz-Birkenau, lugar donde fueron asesinados alrededor de 2,5 millones de personas durante su existencia.

Durante la Segunda Guerra Mundial, el régimen nazi y sus colaboradores asesinaron a un estimado de seis millones de judíos, entre hombres, mujeres y niños, en un intento de aniquilar sistemáticamente a la comunidad judía primero de Europa y después del resto del planeta. Movidos por su ideología racista, persiguieron y mataron también a millones de personas de otras colectividades, entre ellos a gitanos, romaníes, minusválidos, comunistas, homosexuales, enfermos mentales y a miembros de muchos otros grupos étnicos, religiosos, y cualquier otro individuo que de una u otra manera no se ajustara a la demente ideología de la perfección aria de Adolfo Hitler.

En Israel existe un día nacional para el recuerdo de las víctimas del holocausto, llamado Yom HaShoah, pero tiene lugar el día 27 de Nisán (primer mes del calendario hebreo bíblico). Sin embargo el día internacional proclamado por las Naciones Unidas es también conmemorado con visitas oficiales del gobierno a varios puntos del país entre otras actividades.

He aquí una transcripción del mensaje del Secretario General de Las Organización de las Naciones Unidas con motivo del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto.

“Hoy recordamos a los seis millones de hombres, mujeres y niños judíos que perecieron en el holocausto. Un sinnúmero de otros seres humanos también perdieron la vida mientras la crueldad convulsionaba el mundo. Sin embargo, décadas después de la Segunda Guerra Mundial, somos testigos de cómo persiste el antisemitismo y se incrementan otras formas de prejuicio.

Entre los principales proveedores del odio extremo se encuentran los neonazis y los grupos de supremacistas blancos. Con demasiada frecuencia, puntos de vista abyectos se desplazan de los márgenes a la corriente dominante en las sociedades y la política.

Debemos cerrar filas contra la normalización del odio. Cada vez que, en cualquier lugar, se hace dejación de los valores de la humanidad, estamos todos en peligro. Incumbe a todos la responsabilidad de resistir de manera rápida, clara y resuelta el racismo y la violencia. Mediante la educación y la comprensión, podemos construir un futuro de dignidad, derechos humanos y coexistencia pacífica para todos.”