La Batalla de Puebla es una celebración anual celebrada el 5 de mayo. La fecha se celebra para conmemorar la difícil victoria del ejército mexicano sobre el Imperio francés en la batalla de Puebla, el 5 de mayo de 1862, bajo la dirección del general Ignacio Zaragoza.
En los Estados Unidos, Cinco de Mayo ha adquirido un significado más allá de eso en México. En los Estados Unidos, la fecha se ha asociado con la celebración de la cultura mexicano-estadounidense. En México, la conmemoración de la batalla continúa siendo principalmente ceremonial, como a través de desfiles militares.
En los Estados Unidos, el Cinco de Mayo a veces se confunde con el Día de la Independencia de México como “la fiesta nacional más importante de México” que se celebra el 16 de septiembre, conmemorando el Grito de Dolores que inició la guerra de independencia de México con España.
El Cinco de Mayo tiene sus raíces en la Segunda intervención francesa en México, que tuvo lugar después de la Guerra México-Estados Unidos de 1846-48 y la Guerra de Reforma de 1858-61. La Guerra de Reforma fue una guerra civil que enfrentó a los liberales (que creían en la separación de la iglesia y el estado, y la libertad de religión) contra los conservadores (que favorecían un estrecho vínculo entre la Iglesia Católica y el estado mexicano). Estas guerras casi llevaron a la bancarrota al Tesoro mexicano. El 17 de julio de 1861, el presidente mexicano, Benito Juárez, emitió una moratoria en la cual todos los pagos de la deuda externa serían suspendidos por dos años. En respuesta, Gran Bretaña, Francia y España enviaron fuerzas navales a Veracruz para exigir el reembolso. Gran Bretaña y España negociaron con México y se retiraron, pero Francia, en el momento gobernado por Napoleón III, decidió aprovechar la oportunidad para establecer un imperio en México que favorecería los intereses franceses, el Segundo Imperio Mexicano. El imperio era parte de una visión de “América Latina” (término que solía implicar el parentesco cultural de la región con Francia) que reconstruiría la influencia francesa en el continente americano y excluiría los territorios anglófonos de América.
A fines de 1861, una flota francesa bien armada asaltó Veracruz, aterrizando una gran fuerza francesa e impulsando al presidente Juárez y su gobierno a la retirada. Moviéndose desde Veracruz hacia la Ciudad de México, el ejército francés se encontró con una fuerte resistencia de los mexicanos cerca de Puebla, en los fuertes mexicanos de Loreto y Guadalupe. El ejército francés de 8,000 atacó al ejército mexicano mal equipado de 4,000. El 5 de mayo de 1862, los mexicanos derrotaron decisivamente al ejército francés. La victoria representó un impulso moral significativo para el ejército mexicano y el pueblo mexicano en general y ayudó a establecer un sentido de unidad nacional y patriotismo.
La victoria mexicana, sin embargo, fue efímera. Un año después, con 30,000 tropas, los franceses pudieron derrotar al ejército mexicano, capturar la ciudad de México e instalar al emperador Maximiliano I como gobernante de México. La victoria francesa fue de corta duración y duró solo tres años, de 1864 a 1867. En 1865, “con la Guerra Civil estadounidense ahora terminada, EE. UU. Comenzó a proporcionar más asistencia política y militar a México para expulsar a los franceses” Al concluir la Guerra Civil Americana, Napoleón III, enfrentando una persistente resistencia guerrillera mexicana, la amenaza de guerra con Prusia y “la perspectiva de una seria ofensiva con los Estados Unidos”, se retiró de México a partir de 1866. Los mexicanos recapturaron Ciudad de México y Maximiliano I fueron detenidos y ejecutados, junto con sus generales mexicanos Miguel Miramón y Tomás Mejía Camacho en el Cerro de las Campanas, Querétaro. “El 5 de junio de 1867, Benito Juárez finalmente ingresó a la Ciudad de México donde instaló un nuevo gobierno y reorganizó su administración”.
La Batalla de Puebla fue significativa, tanto a nivel nacional como internacional, por varias razones. En primer lugar, aunque en desventaja numérica, los mexicanos derrotaron a un ejército francés mucho mejor equipado. “Esta batalla fue significativa ya que los 4,000 soldados mexicanos fueron superados en gran número por el bien equipado ejército francés de 8,000 que no había sido derrotado por casi 50 años”. Segundo, desde la Batalla de Puebla, algunos han argumentado que ningún país en las Américas ha sido invadido posteriormente por ninguna otra fuerza militar europea. El historiador Justo Sierra ha escrito en su Evolución política del pueblo mexicano que, si México no hubiera derrotado a los franceses en Puebla el 5 de mayo de 1862, Francia hubiera acudido en ayuda de la Confederación en la Guerra Civil de los Estados Unidos y en el destino de los Estados Unidos. habría sido diferente.
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